Sobre Diana
Diana viene de ser seleccionada como joven artista revelación en Francia el pasado 2019. La pintora acumula en su formación dos carreras (Psicología Clínica y T.E.A.T.) y un máster en Dirección de Marketing. Se especializó en arteterapia, de lo que lleva ejerciendo más de diez años en Baztán. A todo esto se le añaden sus estudios artísticos en Nueva York, equivalentes a un Two Years Certificate in Fine Arts.
Nos contó que ella empezó a pintar porque lo que se le daba bien era escribir. Comenzó a dedicarse profesionalmente a la pintura en 2006, dejando atrás su puesto de trabajo en La Vanguardia. Ahora, después de muchos logros y proyectos, su obra se encuentra en colecciones públicas y privadas de distintos países, contando además con 20 exposiciones repartidas por Nueva York, España y Francia.
En Diana vemos el esfuerzo y el dinamismo de una superviviente en Nueva York. También la valentía, tan necesaria para asumir los riesgos que conlleva la ambición en una gran ciudad solitaria. Sin embargo, en ella habita también la tranquilidad de Elizondo y su inherente familiaridad singular, propia de un lugar a la vez pequeño e insondable. Ambos caracteres se funden en su obra. Su pintura es honesta y su pincelada decidida. Diana no dibuja antes de pintar, comienza y termina con determinación.
Nos enseña su visión de los paisajes místicos de Elizondo y los rostros desgastados del Bronx. Ella misma dice: “Cual bicho inquieto con el pincel, busco incansablemente aquello que late, siente y padece.”
Y sus flores. En el pequeño recuadro junto a la serie de los jarrones llenos de color se lee : “las flores hay que pintarlas porque “estamos vivos y aún amamos”, de la mano de la autora.
El domingo preguntamos a Diana por sus referentes artísticos femeninos y nos contestó lo siguiente:
"Hay varias mujeres artistas que son un referente para mí pero si me tengo que quedar con una elijo definitivamente a Louise Bourgeois, que fue artista y escultora nacida en Francia pero con doble nacionalidad, francesa y norteamericana.
Me identifico con ella por muchos motivos, algunos circunstanciales y otros más profundos.
Por una parte siendo europea vivió vinculada a Nueva York como yo hago desde hace años viviendo parte del tiempo allí y como yo estudió en The Art Students League de Nueva York.
A parte de que las dos somos Capricornio, algo poco relevante, creo que su necesidad de expresión se relacionaba sobre todo con una relación maternal no resuelta, como creo que a mí me ocurre también en parte."
Queremos dar unas gracias inmensas a Diana por colaborar con nosotras y desearle muchísima suerte en su camino, aunque siendo Capricornio no tendrá ningún problema, porque no parará de trabajar duro hasta conseguir lo que se proponga.
